Nos preparamos para salir y nos vamos al fiordo. Las vistas
son preciosas, las montañas imponentes y el sol brillante (que poética jajaja
pero es que ha sido así). Las opciones para hacer por aquí son pocas, porque no
hay ni pueblo: dar un paseo corto por los alrededores, hacer un súper trekking,
o contratar uno de los ferrys que te llevan fiordo adentro. Para ir más tranquilos y ahorrar un poco,
cogemos el ferry de las 14:45 que es más barato y así tenemos la mañana libre
para estar tranquilos y pasear. Genial.
Decenas de fotos después volvemos al camping para comer y
nos encontramos a nuestro primer Kiwi (pájaro). Que graciosos son jajaja. Aquí
un kiwi pueden ser 3 cosas: un pájaro, una fruta o un neozelandés. Curioso como
mínimo.
El ferry ha sido brutal. Otra cosa que ha valido la pena.
Casi 1 hora en dirección al mar y otra hora para volver a puerto. Montaña, verde, cascadas y leones marinos! (O
eso creemos que eran jaja) Muy muy chulo. Habíamos leído que si has estado en
Noruega no hace falta que veas estos…pero como no es el caso, a nosotros nos
han encantado. Los ratos que no hacía mucho frio, el barco se movía lo justo y
se podía subir relativamente fácil hemos
estado en la “terraza” exterior. Los otros ratitos, sentado en unos bancos al
aire libre pero protegidos del viento o en una de las mesas de dentro viendo
las vistas por los ventanales y tomando un té calentito (y gratis).
Un apunte: en todos todos todos los sitios el agua es
gratis. Tú vas, te coges tu vaso, abres el grifo y lo llenas. Tan fácil. No
debería sorprendernos pero lo hace. De hecho, apenas hemos comprado agua
embotellada, vamos rellenando. Y de momento sin cagarrinas jajaja
Y la tarde está siendo de relax total. Simplemente pasar la
tarde, que ya mola. Y pasarla en este entorno, mola más.
😘😘😘😘 para los dos!!!
ResponderEliminarAquí está cayendo un tornenton.....
Y abrigaros que luego os duele toooo